Una bonita zorra decidió follar con un hombre grande. La chica no sabe chupar: el hombre quiere meterle la polla más profundamente en la boca, pero ella se ahoga con su saliva y no pasa nada. Pero folló muy bien. Me gustó mucho su figura casi perfecta y sus tetas sin silicona. El final fue clásico: el hombre se cagó en su cara.
Para los que conocen de primera mano lo que es el sexo, enseguida queda claro que es el negro musculoso, que tiene un gran tronco, el que puede satisfacer a estas dos gordas. Para un blanco con una talla media, las posiciones en las que este negro las asa están fuera de su control.
Me he corrido tres veces con este milagro.